Outra vez a guerra

En plena efervescencia da chamada “recuperación da memoria histórica”, a Asociación “Telón e Aparte” e o Concello de Carballo, orixinais que son, prográmannos unha Feira Internacional Outono de Teatro (FIOT) que ten como “leit motiv” a guerra civil española. Das 8 obras previstas, alomenos 5 teñen como argumento a nosa guerra.

Baixo o noso punto de vista, estes que pretenden revivir os feitos ocorridos hai 70 anos non teñen outro fin máis que tratar de gañar a guerra civil 70 anos despois de perdela. Porque a ninguén se lle oculta que a revisión se produce exclusivamente desde un so punto de vista, o dos que perderon a contenda. Eso, en último término, chámase venganza. Que pode ser humanamente comprensible, pero que non é precisamente un sentimento noble. Só contribúe á división e á confrontación, e as institucións públicas non deberan promover nin fomentar tal “recuperación”. ¿Non habería outra temática máis interesante para a FIOT?

O que non acabamos de entender é qué pinta o portavoz do PP de Carballo, Alberto Sueiro, como presidente da asociación que organiza o evento, montando un programa deste tipo. ¿O seu partido está pola labor? Un pouco de coherencia, por favor.

Sobre o manido asunto da “recuperación da memoria histórica”, recomendámosvos este texto do filósofo Gustavo Bueno (que non é sospeitoso precisamente de ser un facha):

“Es evidente que el «recuerdo» de los hechos históricos es el recuerdo selectivo de los hechos históricos, y por tanto parcial o partidista. […] La Historia es obra del entendimiento, y no de la memoria.[…] La memoria histórica o personal es necesariamente parcial y partidista, porque una persona es sólo una parte de la historia.[…] Por tanto, las reivindicaciones de las memorias personales, contra todo tipo de amnesia y de amnistía, no debe hacerse en nombre de la memoria histórica común, sino en nombre o bien de la memoria individual o familiar, o bien en nombre de planes y programas políticos o científicos. Esto explica por qué la llamada «memoria histórica» no es propiamente memoria, sino selección partidista; por qué se eclipsa de modo funcional, y por qué la «memoria histórica», paradójicamente, derriba las estatuas de Lenin o de Franco. Dicho de otro modo, la memoria histórica sólo puede aproximarse a la imparcialidad cuando deje de ser memoria y se convierta simplemente en historia.”

(Pódese ler o texto completo aquí)

Nós tamén queremos contribuir co noso gran de area a ese “loable afán” de “recuperar a memoria histórica”:

“Las elecciones no son más que una etapa en la conquista y su resultado se acepta a beneficio de inventario. Si triunfan las izquierdas, con nuestros aliados podemos laborar dentro de la legalidad, pero si ganan las derechas tendremos que ir a la guerra civil declarada. Yo deseo una República sin lucha de clases; más para eso es necesario que desaparezca una de ellas. Y esto no es una amenaza, es una advertencia; y que no se diga que nosotros decimos las cosas por decirlas: nosotros las realizamos." (Indalecio Prieto, enero 1936)